martes, 15 de abril de 2008

Una mirada personal sobre la seducción: Primera Parte



Hola a todos, soy nuevamente Sparrow, y aquí les dejo algunas reflexiones sobre la seducción.
El arte de seducir y devenir en seductor implica, a mi entender, en primer lugar, la laboriosa tarea de tomarse al mundo de una forma más amena, más relajada, y sin el nerviosismo con el que habitualmente lo hacemos; pues allí radica su esencia. La seducción no es algo así como una “actividad mágica o una habilidad metafísica” a la que no es posible acceder para el grueso de la población; sino todo lo contrario, algo más elemental, que involucra un profundo y conciente dominio de lo emotivo en los seres humanos; y que está relacionado con la simple decisión de “vivir y divertirse”. Sin espíritu de aventura, sin improvisación, sin sorpresa, sin ánimo lúdico, la seducción se reduce a un trámite administrativo; y cuando uno termina dicho trámite puede dedicarse nomás a actividades placenteras, que en verdad lo llenen; y créanme que, no hay nada más aburrido que un tipo humano “predecible” y “burocrático”. Aquella persona que no posea un espíritu juvenil, innovador y creativo, jamás llegará a ser un seductor. La seducción está directamente relacionada con la decisión de vivir e involucrar en ella a otra persona. Los seductores debemos ser capaces de movilizar los sentimientos más genuinos y profundos en una mujer, y no de convencerlas argumentativamente de que somos “su salvación”, “el mesías” que estuvieron esperando durante mucho tiempo. Eso es lo que piensan de sí mismos, todos los “buenos y cornudos compositores de letras de tango”. ¿Soy claro? (voy a entrar más adelante en este tipo de personajes).


Las palabras que conforman el universo en el cual nos movemos, y con el nos comunicamos a diario, están signadas por las valoraciones previas del autoritarismo y la arbitrariedad que las creó; por lo cual, se hace necesario para nuestro propósito (el de seducir) romper, cada tanto, el “curso lógico” de los sentidos, de las significaciones, que de ordinario nos irían desgastando en las conversaciones, y ciñendo hacia una imagen previamente diseñada. Si respondemos por ejemplo, ante preguntas directas de forma directa y previsible, como en un examen, el profesor nos pondrá la nota que él quiera. Lo importante es entender que, en la comunicación informal humana cotidiana, no estamos ante un examen o ante un tribunal a punto de dictar sentencia sobre nosotros; y que es legítimo responder las preguntas que se nos formulen de la forma que queramos, siendo creativos, impredecibles, mostrándonos valiosos y originales; y sobre todo, sin presumir, ni querer impresionar a los demás de ello. Esto, generará un efecto halo en la manera en que los demás nos verán, y advertirán de inmediato, que es mejor estar con nosotros que no estarlo. Esa es la esencia del seductor. Por lo general, las mujeres hermosas, no deben reunir ninguna suerte de carisma especial, para atraer a su círculo una buena cantidad de “amigos buenos”, “amigos incondicionales”, siempre dispuestos a hacerles toda suerte de favores, sino que, la sociedad les ha dado “derechos y libertades” para hacer y decir lo que quieran, por el sólo hecho de ser hermosas. Las demás mujeres saben que ellas sí, deben transpirar para ganarse un lugar en un círculo social, y la atención de un hombre. En el caso de los varones ésto, claramente no es así, el hombre debe desarrollar su espacio, su hábitat, su auditorio, para poder hacer girar “como el sol” a los demás sobre sí (en especial a las mujeres, claro...)




Toda falta, toda carencia, potencia nuestro deseo. Deseamos lo que no tenemos, y nunca lo que tenemos ¿Soy claro? Por eso, la imaginación recorre los caminos del deseo, pues la imaginación necesita consumir deseo para fabricar el sustento, el alimento energizante que le permita continuar viviendo. Si el deseo se extingue, ya no hay nada que hacer allí. Lo que vive desea, y lo que no vive, no. Tan simple como eso. De lo expuesto queda claro que: SEDUCIR (o atraer) = DIVERTIR (o entretener). El gran problema que tiene la inmensa mayoría de los hombres (y también las mujeres) es que aburren. ¿Por qué aburren? Pues sencillamente, porque no viven el momento, ni toman debido registro del otro, ni tienen confianza suficiente en sí mismos para poder trasmitirla a los demás. Este cóctel es uno de los causantes de la incomunicación.




La comunicación entre hombres y mujeres es de dos tipos:

1º) Verbal
2º) No verbal

La comunicación verbal es discursiva, mientras que la no verbal es gestual, actitudinal, motora, y básicamente no racionalizante en un sentido discursivo; lo que no significa que no pueda interpretarse adecuadamente; sino más bien que, no es capaz de ser asimilado por las convenciones gramaticales.
Los hombres perdedores con las mujeres suelen acusar a las mismas de que nadie las entiende, lo cual no constituye más que una generalización inútil sobre el género, y un juicio de valor subjetivo al respecto, dado por su incapacidad de comunicarse dentro del campo No verbal con ellas ¿Se entiende?

Bueno, nada más por hoy.
Un saludo a todos.

15 comentarios:

Nicolás Lucca dijo...

Sos vos??? Jajaja!

Bienvenido de vuelta, man.

Muchas cosas se dicen con determinados códigos corporales.

Pero a la hora de la seducción, el hombre piensa que cualquier cosa que haga la fémina en cuestión, es porque tiene ganas.

Saludos!

capitanfla dijo...

Sparrow, lo suyo es todo un servicio social.

Le agradezco.

Stella dijo...

Lo fascinante de este tema, para mi, es que lo que a una mujer le puede parecer aburrido de un hombre, a otra le puede encantar!
Es como que no hay reglas, siempre hay un roto para un descocido!!

Sin embargo hay hombres que resultan seductores para la mayoria de las mujeres, y viceversa, y ahi es donde entra en juego lo que vos tan bien decis. Creo que ser uno mismo, tenerse confianza y tener registro del otro, es la clave! Y lo mejor de todo es cuando esa combinacion se da naturalmente!
Cómo si fuera tan fácil!!..Je!

Y tu ultimo párrafo se re entiende!
El cuerpo habla, los gestos hablan, las miradas hablan, y dichosos de los que pueden interpretarlos correctamente!
A veces me miro a mi misma en determinadas situaciones y me asusto de mis brazos cruzados o de mi manera de sentarme, solo por dar un ejemplo!

Besiito

Gabriela dijo...

fè de erratas: donde dice “buenos y cornudos compositores de letras de tanto”. no debería decir “buenos y cornudos compositores de letras de tanGo”?

Coincido en que es el deseo el gran impulsor, pero no sòlo el deseo como pulsión sexual que se lo que se asocia a la seduccion, sino el deseo de TODO lo que nos mueve a querer tener/poseer/obtener lo que fuere.

En cuanto a arte de seducir creo que es algo totalmente subjetivo ya que no todos seducimos de la misma manera ni nos seducen las mimas cosas. Por suerte.

En mi caso,a veces, no sòlo me aburro sino que tbm he llegado a proferir grandes bostezos y cabecear en medio de una romántica cena.

Igualmente coincido en que la risa, el divertimento y la orginialidad son armas letales en estas artes y creo firmemente en que todo es una cuestiòn de actitud, firmeza y seguridad en una misma.

besos!

Sparrow dijo...

Bruno: ¿Cómo te diste cuenta? Hice todo lo posible para que no se me reconociera con mi nuevo disfraz... hasta me compré una camisa nueva como podrás ver en la foto.
Un abrazo.

Capitan: No será mucho?
Gracias. Un abrazo

Sparrow dijo...

Stella:

"hay hombres que resultan seductores para la mayoría de las mujeres..."
Gracias, lo tomo como un cumplido.

Gabriela: Sí es así, hay un componente subjetivo, pero estos indicadores anímicos involucrados en la seducción, nos hablan de ciertos patrones que obedecen a
un grado importante de objetividad en el asunto. Y creéme que, lo estudian psicólogos en algunas Universidades anglosajones, que tienen tiempo para dedicarse a estas cosas; aunque no lo creas.
No conozco una sóla mujer a la que no le guste Johnny Depp en el papel de Don Juan De Marco.

Un beso a ambas.

Gabriela dijo...

ja! si te digo que a mi Depp me gusta cuando lo veo en fotos haciendo de él me crees?

Don juan de marco puede ser mooooy lindo.. pero Deep como hombre es mucho mejor.

Me "enamoré" de Depp en una peli muy vieja que se lo veia tocando la guitarra en un bote una noche de luna llena.

Tal vez no me seduzcan las mismas cosas que a todas las mujeres.. tal vez yo no seduzca de la misma manera en todas las mujeres lo hacen.

Me pueden llegar a seducir las cosas mas insòlitas del planeta.. seduzco desde un lugar que ni yo misma se bien cual es.

Igual Deep es divino.. con o sin De Marco que prometo verla. Obvio

Le mando un par de besos.

OliverX dijo...

Adhiero a la sentencia del Capitán.
Sos un servicio a la comunidad.
Abrazo Gorrión!

Sparrow dijo...

Oliverx: Yo tengo la misma opinión de tu trabajo: es realmente un servicio a la comunidad, aunque por desgracia, soy un poco más pesimista que vos, y pienso que los seres humanos estarán hasta el fin de sus días gobernados por la irracionalidad y el sinsentido; así y todo, nunca hay que bajar los brazos en empresas de esta índole, siempre hay que seguir, seguir, seguir y seguir. Son en realidad las espectativas las que hay que moderar más que abandonar los proyectos nobles y bienintencionados como el tuyo.

Muchas gracias por tus palabras y las del Capi, me dan fuerzas también para continuar con lo mío.

Jorge - cinenovedades dijo...

Excelente post, amigo Sparrow.

Creo fehacientemente en que el acto de seducir es divertir o entretener, como bien dices en el post.

Me pareció excelente el párrafo en donde hablas de la comunicación informal humana cotidiana. Realmente buenísima esa reflexión.

Soy Jorge de www.cinenovedades.blogspot.com

Te agradezco enormemente tu visita y elogios a mi humilde blog. Tu mensaje me ha ayudado para conocer este excelente blog al que visitaré seguido.

Saludos, Jorge.

La Dueña dijo...

Excelente post, me gusto de SEDUCIR=DIVERTIR. Totalemte de acuerdo. Gracias por tus paso por mi blog (diablo y alcohol)
Besos!

Sparrow dijo...

Muchas gracias Jorge, veo que algunas personas hablamos el mismo idioma.

Muchas gracias Dueña.

Un abrazo a ambos.
Sparrow

Anónimo dijo...

Junto con Jorge, estoy absolutamente de acuerdo en que seducir = divertir y que uno entra en un juego al momento de entregarse al arte de seducir y dejarse seducir.

Igualmente, entenderán que en nuestro país suele haber un abuso de este juego con histerias y enrollos de telenovela. Para mí se acaba el juego cuando el espíritu lúdico empieza a teñirse con el tinte psicópata de tantos enfermos que andan sueltos por ahí. Creo ver un giro perverso en esta dinámica de la lucha por el poder.

Sparrow dijo...

Apreciado Cebolla: Yo al tema lo veo más o menos así: la idea de la seducción es entender que se da como un juego, en el que se puede ganar o perder, como en un partido de fútbol, y hasta como en la vida misma. Yo intento divertirme en mi trabajo, o cuando juego al fútbol, o cuando escribo algo, y hasta cuando encaro a una mina, desde ya. Conozco gente que, cuando pierde su "equipo de fútbol", quieren "pegarse un tiro", y no es broma. También conozco gente que cuando una mina los rechaza, se vuelven un poco taciturnos, se ocultan e internalizan mal el hecho de haber sido rechazados. (voy a intentar trabajarlo un poco en en blog, con mis modestos conocimientos sobre psicología).
El gran poeta latino Horacio nos aconsejaba el "carpe diem", o sea aprovechar cada minuto de vida que nos quedara aún por vivir. Él, se autodefinía como "un cerdo del rebaño de epicuro". Creo que la esencia del seductor está ahí, en saber trasmitirle a los demás (en especial a las mujeres) ese "savoir faire", ese "savoir être". Creo que para seducir hay que volverse un poco hedonista o epicúreo. No sé si se entiende mi punto de vista.

Un abrazo.
PD: Desde ya que las relaciones de poder están presentes, como en todo ámbito humano (lo hemos visto en mi ex- blog); pero la idea es dotar al varón de armas para hacerlo más poderoso, y desde ya, más interesante a las mujeres. Creo, porque lo he experimentado en mi propia persona, que uno cambiando algunas pequeñas cositas puede llegar a despertar sensaciones muy genuinas e interesantes en las mujeres; y no necesitás ser Brad Pitt.

Anónimo dijo...

Recién estoy adentrándome en tu nuevo blog. A mí me interesa una teoría de la seducción más que técnicas para seducir porque ya estoy un poco grande, y aunque no sé todo, la primera vez que leí algo sobre el tema fue en una entrada de "Poder y sexualidad". Ya di mi opinión sobre Naxos y el otro blog sobre seducción, que dicen cosas que aprendí con los años o que intentan vender cursos. Realmente me parecen poco interesantes porque se parecen a los manuales de autoayuda.

Yo encontré un punto de encuentro con "el arte del engaño" que menciona Sun Tzu en su libro cuando se refiere a la guerra. Seguiré leyendo para ver qué tenés para contarnos de esta parte de nuestra cultura.